lunes, 22 de agosto de 2016

El duro comienzo del curso escolar

JORNADA 1- ATLÉTICO 1-1 ALAVÉS
Goles: Gameiro (p).
No me mientan, ¿quién de ustedes no habló anoche de la final de Milán con alguno de sus compañeros de butaca?
Dijo Simeone para justificar aquellas semanas de silencio que lo de Milán "fue una muerte, y toda muerte necesita un duelo". Obviamente, cuanto mayor sea la pérdida, más intensa la relación que nos unía con el ser que se va, más largo y doloroso será el duelo.
Además, y por desgracia, lo más difícil de un duro golpe no es la caída, sino, posteriormente, aunar las fuerzas suficientes para levantarse plenamente repuestos.
Ya lo escribí en la crónica de nuestra derrota en Milán: "Es muy duro volver a la casilla de salida (sin premio) después de tanto esfuerzo".

NUEVO CURSO CON POCAS CARAS NUEVAS
Y anoche en el Calderón (en el que será último año en nuestra casa), el Atleti volvió a la casilla de salida. Empezó el nuevo curso escolar. Un nuevo curso en el que básicamente hay dos caras nuevas (Gameiro y Gaitán), pero, sobre todo, la buena noticia es que todos los alumnos con buenas notas se han quedado en el colegio y no se han ido a otro mejor o más caro (algo que no ocurría desde hace años. Escribiré un post sobre ello esta semana).

OLVIDAR LA ASIGNATURA HUESO
Y lo mejor que puede pasarte en un nuevo curso es adquirir pronto energías renovadas, motivaciones vírgenes, nuevos retos. Los rumores de Milán aún circulaban como una asignatura pendiente que nos quedó del año pasado. Como la materia hueso que, por desgracia, ya parece atragantarse.
Por ello, empezar el curso con un cate no era el mejor escenario para olvidar.

UN EXAMEN "ESTADÍSTICAMENTE" PERFECTO
Y eso que el Atleti lo hizo prácticamente todo bien durante su primer examen. Como saben los que me siguen soy amante de las estadísticas, así que les dejaré unas cuantas del partido de ayer. Disparos: Atlético 27-Alavés 2; Córners: Atlético 20-Alavés 2; Posesión: Atlético 62%-Alavés 38%...
Sin embargo, como bien saben todos, sólo hay una estadística que importe en el fútbol: Goles: Atlético 1-Alavés 1.
Un gol de Gameiro; otro de Manu García. Un penalti al palo de Juanfran; otro marcado por Cristiano. No hay más. Este deporte es así. Se reduce a eso. Y al que no le guste, que se pase al taekwondo (nos ha dado dos medallas en Río), donde en caso de empate final (tras un round de desempate) el ganador lo deciden los árbitros.         

PRIMER TIEMPO FLOJO
El Atleti estuvo flojo en el primer acto, todo hay que decirlo. Sólo Gameiro, que mandó arriba un pase de la muerte de Koke; y Carrasco, con un disparo al exterior del poste, devolvieron el "uy" a las gargantas de los aficionados colchoneros, tras casi tres meses elevando la voz sólo para pedir una cerveza en el chiringuito de turno.

CAMBIO DE PIEZAS Y ALUVIÓN DE OCASIONES
En la segunda mitad, las gargantas atléticas se secaron de cantar "uys". Salió Torres por Tiago, luego Gaitán (creo que jugar a banda cambiada no le va bien) por Gabi, y por último Correa por Carrasco. El Atleti jugó un 4-4-2 clásico, con dos puntas y dos extremos, que creo que habría ido mejor para intentar desbordar al Alavés que los cuatro mediocentros del inicio (Koke, Gabi, Tiago y Saúl).
El Niño estuvo muy bien. Pegó una en el poste, dio un gran pase largo a Correa, y puso un balón de gol al primer palo a Godín, que remató arriba. El uruguayo se sumó al ataque cada vez que pudo, y ya minutos antes obligó a Pacheco a sacar un remate suyo a bocajarro. Como tampoco a bocajarro acertó a marcar Gameiro, al que se le quedó en boca de gol otro cabezazo de Godín. Veinte córners sacó el Atleti, veinte, ya lo dije antes. Pero esta suerte que hace bien poco era medio gol, anoche apenas se tradujo en un par de remates claros (Hasta Gaitán se cayó sacando uno de esos córners...).

PREMIO TARDÍO, PERO VARAPALO FINAL
En cualquier caso el Atleti lo merecía, sin duda. En la vida, normalmente, la insistencia, el esfuerzo, la tenacidad, la perseverancia... suelen tener premio. Y esta vez, aunque muy tarde, llegó con el tiempo cumplido. Un penalti por agarrón a Torres lo transformó Gameiro (1-0) para maquillar su desafortunado debut (en la propia jugada del penalti tiró fuera un mano a mano).
Sin embargo, los rojiblancos fueron incapaces de defender la única jugada en la que el Alavés se fue decididamente arriba en todo el partido. Los vitorianos, que sí habían aumentado su nivel de agresividad para defender su tesoro en los minutos finales, con entradas más duras y agarrones (hasta entonces el partido fue limpio), vieron cómo la zona ancha colchonera les dejó un enorme vacío que Manu García aprovechó con un trallazo pegado al palo desde más de veinte metros (1-1).
Una vez más, el destino jugó con el Atleti al "sí, pero no". Pareció darle el triunfo, para quitárselo en el último suspiro.

ESPERANDO OTRA CANCIÓN
Tuvo suerte el Alavés, sí. Como la tuvo el Madrid en Milán. Pero lo último que necesitamos ahora son canciones que suenen a mayo. "No te echaré de menos en septiembre", dice el éxito de Los Piratas. Y como también reza su letra, el objetivo del Atleti no debe ser otro que el "seré como el tipo que algún día fui", olvidar el dolor, y esperar otra canción. Su canción. Tiene todo un año por delante.