martes, 6 de marzo de 2018

Y otra vez no pudo ser

JORNADA 23 
BARCELONA 1-0 ATLÉTICO
Resignación. Ése es el sentimiento que he percibido en muchos aficionados colchoneros tras una nueva derrota en el Camp Nou. Lo queramos vestir con los argumentos que más nos consuelen, son doce temporadas sin ganar allí (tres empates y nueve derrotas). Demasiadas.
"No es una obligación ganar la Liga"; "Es imposible competir contra este Messi"; "Son mejores"; "Tienen suplentes de 140 millones"; o "Jamás voy a matarles por perder con Barça o Madrid, es lo normal", son algunas de las frases que leí o escuché a mis hermanos de sangre rojiblanca.

ALGUNOS SE REBELAN CONTRA ESA RESIGNACIÓN
Otras voces (en algunos casos incluso las mismas) se rebelaban contra esa resignación y lamentaban que ya son varias las citas en las que se falla cuando toca dar "el paso definitivo". Varios, apuntaban a que siendo "más atrevidos" nos ha ido mejor contra el propio equipo culé, y que no debíamos asumir tan claramente nuestra innegable inferioridad, en algunos aspectos, encerrándonos como hizo el equipo en la primera parte.
Todas estas reflexiones son válidas, aunque yo comparto más las del segundo grupo. Creo que un Atlético de Madrid que llega al Camp Nou jugándose la Liga (lo que ya es un mérito incalculable) debe salir a morder al césped, y no mostrarse tan contemplativo dejando el 100% del mando del partido al conjunto blaugrana.

SIMEONE: "NO ESTAMOS TAN LEJOS DE LO QUE QUEREMOS"
Sin embargo, mi confianza en Diego Pablo Simeone es infinita, y son sus meditaciones las que más me importan. "Fue un partido parejo. No estamos tan lejos de lo que queremos. Son seis años que seguimos intentando mejorar y no vamos a detenernos mientras yo siga en el club", manifestó a los medios tras el partido.
"No estamos tan lejos de lo que queremos...". Pero mi pregunta es, con piezas clave como Gabi, Juanfran, Filipe Luis o Godín en el ocaso de su carrera, ¿este equipo tiene margen de mejora?
Dependerá de los relevos, está claro. Vrsaljko, como ejemplo, ya está sentando de forma habitual al bueno de Juanfran. Pero configurar un bloque con la fortaleza y el espíritu ganador de aquel que levantó la Liga de 2014 y nos llevó a la Final de Champions, será complicado.
Los ciclos se agotan, y quién sabe si el nuestro está llegando a su fin. Esperemos que no. Desde luego, mientras Simeone continúe, las posibilidades de que este animal competitivo siga vivo son muchas.

UNA PRIMERA PARTE DECEPCIONANTE
Volviendo al Camp Nou, la primera parte de los del Cholo fue decepcionante. Los minutos pasaban y la posesión del Barça era total, rondando el 70%. Por habitual, lo preocupante no era esto, sino que en ese 30% en que el Atleti tenía la pelota era incapaz de hilvanar más de tres o cuatro pases. Y de tirar a puerta ya ni hablamos. Parecía que estábamos con diez...


MÁS VALIENTES NOS FUE MEJOR
Como comentábamos al principio, con un planteamiento más atrevido le fue mejor a los rojiblancos en ocasiones precedentes. En la primera vuelta, en el Metropolitano, una presión alta ahogó al Barça en los primeros 20 minutos, hasta que llegó el gol de Saúl.
Hace dos temporadas, en el propio Camp Nou, ocurrió algo similar, con un comienzo arrollador en el que Griezmann y Carrasco iniciaban la presión hasta el área blaugrana. Ese día Koke nos adelantó a los diez, pero el Barça nos remontó antes del descanso.
Por no hablar de los cruces en las eliminatorias de Champions.  

LA PRESIÓN FUE DESORDENADA Y EL BALÓN ERA DE INIESTA
Sin embargo, esta vez cuando se intentó presionar arriba no fue en acciones coordinadas, y hubo ocasiones en las que Diego Costa y Griezmann iban los dos a presionar al mismo, u otros momentos en los que un atacante rojiblanco presionaba y nadie le acompañaba.
Así que la pelota era del Barça, y en gran medida de Iniesta... que se lesionó. Eso sí, los blaugranas apenas probaron a Oblak, más que en un tiro blando de Messi y un remate en un córner de Busquets.

TERCERA JORNADA CONSECUTIVA CON GOL DE FALTA DE MESSI
Hasta que llegó la falta. En el minuto 25, Thomas golpeó a Messi en la frontal, y el argentino colocó la pelota en la escuadra con un lanzamiento perfecto (1-0). El rosarino lleva ya tres goles de falta en tres jornadas consecutivas, cifra de la que desconozco si hay precedentes.

THOMAS, EL ÚNICO CENTROCAMPISTA VERTICAL
Algunos han sacrificado a Thomas por la infracción que a la postre costó el único gol del encuentro. Para mí, junto a un Giménez que se multiplicó en defensa, fue el mejor de los nuestros. El único que rompió líneas desbordando a algún contrario y el único que dio algo de verticalidad al juego rojiblanco. Eso sí, asume riesgos que en ocasiones pueden provocar sustos. Pero perdiendo 1-0, los pases de seguridad en horizontal generan poco peligro.


LA SEGUNDA PARTE MEJORÓ; Y LOS CAMBIOS, OFENSIVOS
La segunda parte fue mejor. Por primera vez en el partido, el Atleti jugó en campo culé, sí se tuvieron posesiones prolongadas, y se acechó el área con alguna falta lateral o córner. Los cambios fueron netamente ofensivos, tanto, que cuando Gameiro entró por Gabi me asusté, ya que el trabajo de contención que el capitán hace en medio campo sólo se valora realmente cuando no está. Correa en sus primeros minutos dio sensación de mordiente, pero los ataques colchoneros no llegaban a concretarse. No era el día.
Griezmann la pegó muy arriba en una buena dejada de Saúl, pero ni el francés ni Costa aparecieron en ataque. Mientras, Saúl, Gabi y Koke naufragaron en la zona ancha, especialmente el vallecano, que falló varios controles y pases fáciles.
En una cita como ésta, ante un rival de esta entidad, si tus mejores futbolistas no están enchufados es imposible ganar.

JUGADA MUY SINTOMÁTICA EN EL MINUTO 72...
Para mí, una de las jugadas más sintomáticas del partido se produjo en el minuto 72. Griezmann baja hasta su propia línea de fondo para tapar una internada de Sergi Roberto, y en su ayuda aparece para cortar el pase atrás... Diego Costa. Con los dos delanteros luchando en la posición de lateral izquierdo, se hace muy difícil llegar arriba.
En cualquier caso, el Atleti tuvo la suya. Correa hace un gran recorte, la cuelga desde la derecha, Diego Costa la gana de cabeza ¡entre dos defensas! y Gameiro fusila con la zurda a la red.
DEBERÍA CAMBIAR LA NORMA DEL FUERA DE JUEGO ¡¿POR UNA PIERNA?!
Salto de mi asiento para cantar el gol, pero de inmediato compruebo la bandera en alto del linier. ¡Una pierna! Por una pierna estaba adelantado Diego Costa. Una jugada que me recuerda al gol de Ramos en la Final de Milán... que subió al marcador.
No soy ventajista ahora, ya que entonces reconocí que se trataba de un "ligero" fuera de juego. "Con las reglas del juego en la mano debió ser anulado... Pero no lloraré una Champions perdida por una decisión arbitral que cuanto menos era complicada", dije entonces.
Ahora, voy más allá. Creo que la norma debería cambiarse. Si su objetivo es que un delantero no tome ventaja por su posición adelantada, estos fueras de juego por medio cuerpo, o por una pierna, no deberían ser fuera de juego. ¿Qué ventaja obtuvo Costa, si tuvo que saltar rodeado de Sergi Roberto y Piqué? 
De hecho, viendo las repeticiones, Sergi Roberto ni abre la boca (Diego Costa le gana claramente la posición) y Piqué, Rakitic o Umtiti sólo levantan la mano a raíz de ver la bandera levantada del linier... Fuera de juego de libro, vamos.

AL ATLETI LE FALTA UN POCO MÁS
Pero de poco vale llorar. Los tres puntos se quedaron en Barcelona y la distancia vuelve a ser de ocho más el goal average, con lo que la Liga, siendo honestos, está perdida.
Como ya dije en la primera vuelta, a este Atleti le falta un poco más para luchar de poder a poder con Barça y Madrid. En el caso concreto de los azulgrana, ya no son sólo las doce temporadas sin ganar allí, sino que también se suman ocho años sin derrotarlos en casa (2-1 en la 2009-10).
Queda la UEFA Europa League, sí. Pero yo, personalmente, tengo ya demasiadas ganas de volver a ganar un título en el que Madrid y Barça estén de por medio. ¿No estamos tan lejos?   

domingo, 4 de marzo de 2018

Gracias Cholo, Gabi, Godín, Koke... Gracias Atleti, por regalarnos otra Final

Durante una década, del 27 de mayo de 2000, al 12 de mayo de 2010, la única Final que jugó el Atlético de Madrid fue de Intertoto (en agosto de 2004...). Y la perdimos.
Vaya por delante esta frase introductoria, por si alguno no entiende por qué tenemos que estar agradecidos. 

EN ESA ÉPOCA CREÉ ESTE BLOG
Durante esa década de mediocridad e ignominias, paso de dos años por Segunda incluido, creé este blog: Un Grande Sin Memoria. Un nombre por el que algunos me preguntaban, y que no quería decir otra cosa que el Atlético de Madrid era un grande, innegablemente, pero que durante muchos años había entrado en un periodo de amnesia que le hizo olvidar que lo era (abrí el blog en febrero de 2007... Ha llovido).
Durante esos años, entrevisté a varios ex jugadores colchoneros que me contaban cómo eran esos Atletis mejores que los de esa época gris: Don Adrián Escudero, Paulo Futre, Caminero, Aguilera, Miguel Ángel Ruiz, Alfredo Santaelena... o Adelardo Rodríguez.

ADELARDO ME CONTÓ LO QUE ERA EL ATLETI DE LOS AÑOS 60 Y 70
Éste último, el jugador con más partidos en la historia del Atlético de Madrid (550 partidos con la rojiblanca), me recordaba que en sus años (17, ni más ni menos) peleaban contra Madrid y Barça "de poder a poder". 
“No se fichaba a lo loco. Era un equipo que estaba hecho. Se iban reponiendo las piezas que por edad o por lesión le faltaban al equipo. Al estar tanto tiempo  juntos, jugábamos casi de oídas y eso influye mucho”, argumentaba en aquella entrevista.
Adelardo ganó tres Ligas, pero cuando no se ganaba "casi siempre estábamos luchando por ella hasta el final". Y eso es lo que ocurre ahora, desde la llegada del Cholo. Por eso, quiero dar las gracias.

GRACIAS POR HABER RESUCITADO A UN EQUIPO MUERTO
Gracias por haber resucitado a un equipo muerto en diciembre de 2011, eliminado de la Copa del Rey por un Segunda B, undécimo en Liga a cuatro puntos del descenso... y meterlo en Europa, a dos puntos de la Champions, y convertirlo en campeón de la UEFA Europa League.
Gracias Diego Costa, Falcao, Miranda... por hacernos campeones de Copa del Rey en el Bernabéu, y ganar al Real Madrid más de trece años después...
Gracias Godín, por ese gol en el Camp Nou que nos devolvió a lo más alto de la Liga, a ser campeones, 18 años más tarde; por partirte la cara cada día por esta camiseta.

GRACIAS POR CUMPLIR NUESTROS SUEÑOS
Gracias Gabi, por representarnos, por ser ese capitán que está cumpliendo el sueño de niño de todos los que poblamos las gradas, por dejarte cada gota de sudor, por haber defendido con un orgullo y una dignidad infinitas nuestro escudo en esas dos Finales de Champions.
Gracias Fernando, por esos goles que cada vez que marcas nos quitas quince años de encima, y por explicar a cada uno que se sienta en ese vestuario qué significa ser del Atleti.
Gracias Koke y Saúl, por haceros hombres en este club, y demostrar con hechos que el sueño de todo canterano rojiblanco es triunfar y perpetuarse en el primer equipo del Atlético de Madrid.

Gracias Filipe, por haber probado a todos esos que tienen la cabeza en otra parte que irse de esta familia es uno de los mayores errores que se pueden cometer en esta vida.
Gracias Courtois y Oblak, por los cinco Zamoras que habéis traído a nuestras vitrinas (ya me apunto el de este año) y por, desde Bélgica y Eslovenia, estar haciendo realidad bajo palos eso que otros criados en esta casa no quisieron.
Gracias  Juanfran, por haber elegido el camino correcto, por haber sacrificado tanto... el fútbol te debe una.
Gracias Tiago, por guiarnos, por tus lágrimas...
Y gracias también a ti, Griezmann, porque más de cien goles no los mete cualquiera, por tu clase, por tenernos otro año más en la pelea, por mucho que te hayas equivocado con tus gestos o con tus palabras. Es de bien nacido ser agradecido.
Gracias Cholo, porque ésta es tu obra. Gracias por esa Liga tan anhelada en 2014; gracias por tenernos luchando hasta la penúltima jornada por la de 2016; y gracias por tenernos ahora soñando con ésta.      

GRACIAS POR TENERNOS RESOPLANDO, MORDIÉNDONOS LAS UÑAS...
Gracias, de verdad, gracias, de parte de aquellos que no pudimos vivir ese Atleti grande de los años sesenta y setenta... y que ahora tenemos el privilegio de acudir cada jornada, al Manzanares o al Metropolitano, con un cosquilleo en el estómago.
Gracias por tenernos mordiéndonos las uñas, resoplando, tirándonos de los pelos y mirando el reloj cada 20 segundos en los minutos finales de cada partido, porque cada punto cuenta, porque con este Atleti no hay competición tirada ni partido de trámite.

Gracias por creer, trabajar, y demostrar que se puede; gracias por nunca dejar de creer; gracias por tenernos en un constante "final a final", como en esas últimas cinco fechas de 2014.
Gracias por regalarnos una nueva final hoy en el Camp Nou. Gracias por tenernos durante semanas fantaseando con este partido. Gracias por estar ahí. Y esta tarde, ocurra lo que ocurra, mi principal mensaje para todos vosotros sólo será uno: GRACIAS, ATLETI, GRACIAS.