JORNADA 5- BARCELONA 1-1 ATLÉTICO
Goles: Correa.
Goles: Correa.
Les
confesaré algo: los Barça-Atleti no son lo que eran...
Su intensidad es máxima, a uno se le puede salir el corazón de la boca viéndolos, la tensión y los rifirrafes entre los jugadores de ambos conjuntos son constantes... Pero el espectáculo vertiginoso de antaño hace tiempo que murió.
Su intensidad es máxima, a uno se le puede salir el corazón de la boca viéndolos, la tensión y los rifirrafes entre los jugadores de ambos conjuntos son constantes... Pero el espectáculo vertiginoso de antaño hace tiempo que murió.
Las
tremendas galopadas a la contra de Kosecki y Caminero para remontar un 0-3 en
la 93-94 (4-3); la dolorosa eliminación copera tras el póker de goles de Pantic
en el Camp Nou (5-4); o las remontadas por 4-2 (con Agüero tumbando a Gabi
Milito como ayer emuló su compatriota Correa -se me asemejan en muchas cosas-
con Mascherano) y 4-3 (con Agüero y Forlán en plan estelar) a finales de la
pasada década, son partidazos bañados de goles que ya no volverán...
EL CLÁSICO BARÇA-ATLETI ACTUAL
Lo dijo el
Cholo en zona mixta: la primera parte ha sido el clásico Barça-Atleti...
El clásico
Barça-Atleti de los últimos años. Con un Atleti bien replegado atrás,
basculando como un acordeón, con un repliegue intensivo impecable y sin dejar
ni una sola fisura... y un Barça con una posesión insultante (71%-29%... Oh
Dios mío), rondando casi siempre el área rojiblanca (lo que deja el corazón de
nuestra ajada afición en un puño), pero sin ser capaz de generar oportunidades
claras.
Alguna vez
el Barça asusta, como en un zurdazo fuera del área de Messi que blocó bien
Oblak, o un derechazo de Neymar (tras un error de Saúl en la salida) que lamió
el poste; y alguna vez, el Atleti se estira y responde, como en un disparo
cruzado de Carrasco (bien en la primera parte; ausente en la segunda) que
repelió Ter Stegen, o un zapatazo a las nubes de Filipe (el resto lo hizo todo bien)
tras una buena contra.
TANTO MERODEAR SUELE ACARREAR CASTIGO
Sin embargo,
con este planteamiento (que se ha repetido de forma muy similar en los últimos
Barça-Atleti de Liga o de Champions, donde casi siempre ganó el Barça por
escaso margen), tanto merodear el área colchonera acaba acarreando su castigo.
Así, en el
minuto 41 Rakitic apareció desde segunda línea aparentemente de la nada y con
la cabeza fusiló un perfecto centro de Iniesta (1-0), el mejor culé junto a Piqué.
Así se llegó
al descanso. Sabiendo que el Atleti debería dar un paso adelante, con el
consiguiente riesgo que conlleva dejar metros de campo a través a tres
depredadores como Messi, Luis Suárez y Neymar.
EL ATLETI DIO DOS PASOS ADELANTE...
Pero, como
casi siempre que se ve por debajo, el Atleti dio el paso adelante. En cinco
minutos, llegó más que en toda la primera parte. Un tiro de Griezmann lo detuvo
Ter Stegen; un pase de la muerte de Filipe Luis lo cortó la zaga culé; y en una
buena contra, Griezmann la pegó de pena, con Carrasco en buena posición.
Y entonces,
se hizo la luz para el Atleti. El mayor depredador culé, Messi, se marchó lesionado;
y Simeone dio dos pasos más hacia adelante, introduciendo en el campo a Correa
por Saúl y a Torres por Gameiro (el francés rompió por velocidad a la zaga
blaugrana. Pero no se pudo finalizar ninguna de sus arrancadas).
...Y TUVO PREMIO
Y apenas le
había dado tiempo a Correa a colocarse las medias y a Torres a atusarse el
flequillo (miento, esto sí le había dado tiempo), el Niño asiste al argentino
con un toque sutil que se cuela entre las piernas de Piqué, y Correa tumba a
Mascherano con un recorte, emulando a su hermano Kun, y la coloca tan ajustada
al poste derecho de Ter Stegen que todavía la está buscando. 1-1. Quedaba media
hora por delante y el cuerpo sólo me pedía comernos a los culés.
LAS PERSONAS NO CAMBIAN
Pero las
personas no cambian. El Cholo, que había sorprendido con ese doble cambio tan
ofensivo, tardó diez minutos en meter a Thomas por Carrasco en el campo y
reducir los riesgos. En honor a la verdad, un Atleti en el Camp Nou con
Griezmann y Carrasco en bandas, y Torres y Correa en punta, hubiera sido
ofensivo hasta para el propio Radomir Antic.
El Cholo
tiene su esencia conservadora, pero el Camp Nou y este Barça de vértigo asustan
y te obligan a recular. Y eso que Luis Suárez no tuvo el día (otra vez se
retrató con una plancha a Filipe) y Neymar fue totalmente anulado por Juanfran
(enorme). El brasileño aún tuvo una falta en la frontal que nos hizo a todos
contener la respiración.
¡Y qué
demonios! El Camp Nou no era Milán, y el 1-1 valía. Más tras el empate en casa
dos horas antes del Madrid.
EL QUE NO ARRIESGA NO GANA
La valentía
tiene premio. Dice el refrán que el que no arriesga no gana, y el riesgo del
Cholo ganó un punto. Un punto importante, que el año pasado nos habría hecho
ganar la Liga, porque se perdieron ambos partidos con el Barça. Y es que, a
veces, salir de aquello a lo que estás acostumbrado, ser valiente y dar un paso
al frente, provoca resultados altamente satisfactorios. Y este Atleti, siempre
va de frente. Los pasos atrás, ni para coger impulso.
Seguimos
trabajando... y sin cuatrivote.