lunes, 21 de noviembre de 2011

Menos mal

El menos mal fue la frase más repetida en el Vicente Calderón este domingo. Menos mal, cuando en el minuto 68 Pizzi conseguía poner el 1-0 después de un partido muy trabajado en el que el Atlético no era capaz de batir a un Levante bien ordenado.
Menos mal, cuando en el 74 Adrián cabeceaba el 2-1, sólo tres minutos después de que el Levante hubiera neutralizado en un suspiro lo que había costado conseguir más de una hora.Y menos mal que el Atlético de Madrid terminó haciéndose con los tres puntos, porque de lo contrario los rojiblancos hubieran visitado el Bernabéu instalados en lo más hondo de la media tabla, más cerca de Segunda que de Europa y con la moral derrengada.
El triunfo pone al equipo a un punto de Europa y a dos del Sevilla, que ahora mismo se puede decir que marca los puestos Champions, ya que, aunque el cuarto es el Levante (con siete de ventaja todavía) es de prever que los de Ignacio Martínez, aunque un conjunto encomiable, acaben la Liga por la mitad de la clasificación.

LA AFICIÓN VOLVIÓ A "JUGAR" CON MANZANO
Sin embargo, esta victoria no deja de ser más que un parche, un balón de oxigeno, un paliativo, ante un enfermo que evoluciona a tirones y cuyo doctor no cuenta con la confianza de los familiares del paciente ni de los directores del centro desde antes de empezar el tratamiento.
Gregorio Manzano estuvo lejos del banquillo del Calderón durante varios minutos. Minutos, al inicio de la segunda parte, en los que el Manzanares volvió a acordarse de Luis Aragonés y demandó a Reyes como el salvador. El utrerano salió a calentar apenas unos minutos después de la tonadilla. Me sigue dando cierta lástima, en cualquier caso, ver cómo la afición “juega” con su poder contra un títere que tiene la soga al cuello, pero no es capaz de arremeter con la misma decisión contra los causantes de que llevemos doce años sin ganar un derbi. Señores, que dentro de poco ya habremos perdido la cuenta. Con Luis o sin Luis. Con Manzano o con Schuster...
Es curioso, y lamentable, que uno de los que se postula para nuestro banquillo, a sus 52 años siga siendo protagonista de la antepenúltima victoria frente a los blancos. Ojo, año 1992. Desde entonces, dos triunfos en 1999 (3-1 y 1-3). Y se acabó...

OTRO INICIO "SOSTENIDO"
Pero he venido aquí a hablar del Atleti-Levante, que del derbi ya habrá tiempo, y ganas, hasta que suene el pitido inicial, claro...
Volví a preguntarle a mi padre si veríamos un inicio arrollador protagonizado por un equipo herido tras el ridículo de Getafe. O si, por el contrario, ya nos habríamos olvidado tras dos semanas y la victoria “balsámica” en Egipto. Ja.
Ni lo uno, ni lo otro, sino más bien lo de siempre. El Atleti del dominio sostenido, con un Silvio muy participativo por la banda derecha (lástima lo de este chico y sus pubalgias, sus esguinces y sus rarezas), con Diego probando fortuna y chocando en el área, con Tiago mandando una volea alta (¡Pégala abajo!, le gritaba uno. Qué fácil se ven los toros desde la barrera...) y con los colchoneros encerrando en su campo a los granotas durante algunos minutos. Pocos. Muy pocos.
Después el encuentro entró en una fase de pausa y monotonía que lleva a escuchar otras frases como que “este equipo no juega ni a la taba”... Y sólo Arda Turan puso en aprietos a Munúa con un disparo lejano. Una lástima que la Eurocopa se vaya a perder a este jugadorazo, que dio un recital en el segundo acto.

EL LEVANTE AVISÓ
Tras el 0-0 al descanso, pocos podrían presagiar el 3-2 final. Pero así ocurrió. Un 3-2 que igual podía haber sido otro si el Levante hubiera acertado en las dos que tuvo en los tres primeros minutos de la segunda parte. Primero fue Xavi Torres el que se la tiró a las manos a Courtouis. Y luego fue Courtois el que tiró las manos a Valdo. El extremo encaró solo al belga, que en el mano a mano sacó una manopla prodigiosa para rebañarle el balón. Lástima de portero cedido. Esperemos que el sábado esté acertado.
Las dos ocasiones levantinistas despertaron los cánticos de la grada, y, por fortuna, a Diego y a Turan. El primero dejó solo a Adrián en un pase fenomenal. El asturiano se topó con Munúa en su salida, y en el rechace, a puerta vacía, Salvio remató a trompicones y la mandó fuera. El argentino se fue entre algunos silbidos sustituido por salvador Reyes y con la grada preguntándose cómo el Benfica se planteó pagar 15 kilos por él...

Y REYES LO HIZO FÁCIL
Y la salida de Reyes tuvo el efecto dinámico esperado por todos, no sé si incluso por Manzano.
El fútbol es muy fácil, a veces. El 1-0 llegó en cuatro toques. Despeje de la defensa, Diego la baja por el pecho y envía para Reyes. Carrera del utrerano de 25 metros y asistencia para Pizzi que bate por bajo a Munúa. Tan fácil, tan difícil. El portugués, por cierto, había entrado en el descanso por su compatriota Tiago, lesionado, y aportó como siempre descaro, verticalidad y muchas ganas. Igual no es tan malo este chico salido de quién sabe dónde como “recambio” de Forlán.
Y mientras la grada se felicitaba por lo sufrido de la victoria, llegó el empate. Hay que decir que con mala suerte. Perea despeja en la banda para cortar el ataque levantinista. La pelota rebota en Juanfran y le cae a Barkero, para apurar línea de fondo y poner el pase de la muerte a Xavi Torres (1-1).

LA CONEXIÓN ARDA-ADRIÁN
Los cantos fúnebres volvían a sonar en el Calderón. Pero entonces apareció Arda Turan. El turco rompió a Nano por línea de fondo como quien aparca en batería y la puso en la cabeza de Adrián, que empujó el 2-1. Cuarto gol en Liga del asturiano. El tercero a pase del turco. Esta conexión funciona. Esperemos que dure.
Y cuando el Calderón esperaba cuarto de hora de sufrimiento, aderezados por una falta de Rubén lamiendo el larguero, llegó el tercero. Una buena recuperación en ataque de Diego terminó con el brasileño marcando a la media vuelta tras un regalo de Javi Venta (3-1). Menos mal.
El resultado pudo ser mayor si Pizzi hubiera acertado con toda la portería a su favor tras un pase de la muerte de Filipe Luis a exquisita prolongación, de tacón, de Diego. Pero fue menor porque Reyes no acertó a despejar un pelotazo largo de Farinós (¿dónde estaba Perea?) y Juanfran se quedó solo para asistir a Rubén en el 3-2.

Y EL SÁBADO...
Lo más positivo, que se lograran tres goles sin la presencia de Falcao. El sábado, esperemos que con el colombiano, será otra historia. Yo, qué quieren que les diga, siempre tengo alguna esperanza. Desde luego el Bernabéu, se nos da mejor que el Calderón...

4 comentarios :

Julio dijo...

Está claro que lo más preocupante es lo que dices al principio de la crónica: Esta victoria no deja de ser más que un parche. Pues tienes toda la razón.

El equipo, de nuevo deambula por la competición sin un rumbo claro. Manzano no contribuye y el Atlético vive desde la urgencia como tantos años atrás.

Una pena, José.

Emilio dijo...

Lo del otro día no tiene parangón en el camino inexorable al esperpento que seguimos...la grada realizó un cambio...(sin entrar a valorar la procedencia o no del mismo)

Un saludo

Unknown dijo...

Yo últimamente al atleti le tengo abandonado. Han sido muchos ridículos ya y el de Getafe fue la guinda... Aparte que quedar 3-2 con el Levante en tu casa es de vergüenza.. Este equipo no tiene sangre. Llevamos así mucho tiempo y no va a cambiar. Aun así sigo pensando que Manzano no es entrenador para este atleti. Y lo de intentar defenestrar a reyes.. En fin.

Este sábado veremos que ocurre en el campo vikingo

Rafael dijo...

Tres cosas rápidas por no repetir siempre mis mismos comentarios:

1.-3 ptos más para llegar a los 42. No aspiramos a más. El centro del campo nuestro hace aguas (Mario y Tiago son mediocres) y me gusta cada día más Turan.

2.- Suscribo el comentario de Ger.

3.-José, cada vez que llega un derby me acuerdo de tu famosa portada del Atlético-Trampas. Y te digo lo de siempre: Al final tu portada, la que tienes guardada en tu casa, se va a convertir en una pieza de coleccionista.
Yo no veo el día que ganemos al trampas. Como no se vayan los delincuentes es imposible ganarles. Normalmente perdemos por las plantillas malas que nos hacen los golfos, pero cuando tenemos opciones de ganar aparacen los arbitros y nos matan (Gol de Perea o Gol de Huntelaar con Abel en el banquillo).
Pinta mal el sábado: ellos llegan lanzados, nosotros hacemos aguas en el centro del campo que nos condiciona en ataque y en defensa, Manzano es mediocre y encima ponen el arbitro que quería el Trampas. Yo me huelo un 4-0 tranquilamente.

Un saludo