Profundidad de banquillo

El Atlético de Madrid ganó anoche al Real Zaragoza gracias a su profundidad de banquillo. La jugada del único tanto del encuentro la protagonizó un hombre que hasta ahora no había disputado un solo minuto, pero que está llamado a ser muy importante (Filipe Luis), mientras que la rubricó otro que será suplente habitual de Agüero y Forlán, y que esta vez sí aprovechó su oportunidad (Diego Costa).
A esto se le añade que el centro del campo fue comandado por otro hombre que aún no había sido titular (Tiago), aunque fue el único de los tres que no sobresalió en la prueba.
Los rojiblancos deberán encomendarse a ese banquillo para intentar ganar el domingo en Sevilla ante las bajas de Diego Godín (que a mi juicio realizó su mejor partido desde que es atlético) y de José Antonio Reyes, que volvió a recordarnos que a veces puede mostrarse tan desequilibrado como desequilibrante.

¿QUIÉN ERA EL DELANTERO CENTRO DEL ZARAGOZA?
Los dos primeros citados, Filipe Luis y Diego Costa, fueron los más destacados de una primera mitad tibia, anodina, en la que el Atlético con poco demostró su superioridad, mientras que el Zaragoza dio muestras, con mucho, de que es un serio candidato al descenso si no vuelve a acontecer una revolución en el mercado invernal.
Que el delantero centro maño era negro (Marco Pérez) no lo descubrí hasta la segunda parte, cuando el Zaragoza “atacaba” en mi fondo. En la primera mitad, el balón no se le aproximó a más de 20 metros...

FILIPE LUIS MOSTRÓ SU REPERTORIO
Volviendo a Filipe Luis, el brasileño la pisaba, con la derecha, con la izquierda, hacía una fintita, ponía un par de centros envenenados, y sacaba el primer disparo en un zurdazo lejano. Mientras, en la grada se felicitaban por contar por fin con un lateral de recorrido, y había quien bromeaba con que Antonio López “sólo quedará para levantar trofeos”. Lo siento por el de Benidorm,al que tengo un especial cariño, pero como le dije a mi padre “de no ser porque Lendoiro se subió a la parra, es que este tío sería hoy el lateral titular del Barça”... En cualquier caso, habrá minutos para todos.
Y dentro de su repertorio, del que dio buena muestra en media hora, exhibió una velocidad endiablaba en la jugada del 1-0, haciendo parecer a Jarosik una abuela en taca taca, y apurando línea de fondo para servir en bandeja el gol a Diego Costa.Al también brasileño le vendrá bien este tanto, tras sus fallos ante Athletic o Aris. El corpulento delantero (sigo pensando que tiene sobrepeso) volvió a estar batallador y se plantó solo ante Doblas minutos después, tras una gran asistencia de Reyes, pero su tiro fue bien taponado por el portero andaluz. Un Doblas que entró por Leo Franco, que se marchó lesionado de la que fue su casa durante un lustro, y que debió serlo más, si atendiendo a la lógica se le hubiera renovado y se hubiera permitido a De Gea quitarle el puesto de forma “natural”...

NO USE GOMINA SI VA A PRACTICAR DEPORTE...

El partido llegó al descanso de forma sosegada y todo invitaba a pensar en un 3-0 sin despeinarse. Pero aquí el único que no se despeina sobre un campo de fútbol es Muñiz Fernández. Y comenzó a demostrarlo.
A los trece minutos de la reanudación, un plácido balón que venía rebotado de entre Ander y Tiago, es recogido mansamente por De Gea. Godín y Domínguez se desentienden, Marco Pérez no dice esta boca es mía, pero el silbato inquisidor de Muñiz Fernández rompe el silencio y de donde no hay nada pita una cesión en la frontal del área chica.El asturiano reparte una tarjeta a Domínguez; Sinama ejecuta la falta indirecta alto, pero Muñiz manda repetir y muestra otra amarilla a De Gea por adelantarse. El segundo intento del Zaragoza se estrella en la barrera y el público respira.
En la contra, Reyes persigue el pelotazo y Contini cae. Entonces, el inefable Muñiz saca la roja al utrerano. En esos momentos, uno piensa que definitivamente usar gomina para practicar deporte no puede ser sano, y que, con el sudor, el gel fijador ha debido filtrarse al cerebro del colegiado asturiano y provocar algún tipo de cortocircuito...Por desgracia, por la tele uno comprueba que el cortocircuito ha correspondido a Reyes, rememorando aquellas expulsiones de dos años atrás a las que nos tenía tan acostumbrados (es su cuarta roja de rojiblanco).
En cualquier caso, sigo pensando que usar gomina para practicar deporte no puede ser bueno.

SUFRIMIENTO FICTICIO; GODÍN, VALLADAR

La media hora por delante sólo dio para un sufrimiento ficticio (el Atleti tiró más que el Zaragoza en los últimos minutos) y para que Godín sufriera un esguince de rodilla a base de taponar todas las acometidas mañas, elevando a su máxima expresión el termino de “valladar” en el fútbol.
El domingo en el Sánchez Pizjuan será una ocasión propicia para lograr nuestra segunda victoria allí desde 1993, comprobar ante un rival de peso si el equipo realmente cuenta con recursos desde el banquillo, y esperar que a Gregorio Manzano aún no le haya dado tiempo a hacer milagros.