DIEGO COSTA NO DEBIÓ JUGAR
Y es que Diego Costa es el alma de este Atlético de Madrid
que, también en Champions y en el mismísimo Camp Nou, demostró que llega a todo.
Eso sí, creo que el que quizá no debió llegar por sus
dolencias en la rodilla (y deberían pensarse muy mucho lo de la vuelta con lo
que hay en juego) fue el propio Diego Costa.
Tras un inicio arrollador de los rojiblancos (en los cinco
primeros minutos Villa ya tuvo dos ocasiones, especialmente la segunda tras un
fallo de Pinto, y salió presionando al Barça en su propio campo ¡y teniendo más
posesión!) el que desentonaba era Diego Costa.
Que le daban un balón en la frontal: control largo que se
pierde por línea de fondo; que se marcha a trompicones en carrera sacando la
bola desde atrás: termina dando un pase… a fuera de banda; que debe aguantar el
balón de espaldas con el equipo saliendo: la pierde en campo propio ante Xavi y
genera la primera ocasión del Barça, en un zurdazo de Iniesta en el que Godín
se cruza con todo, providencial, para repelerlo.
Sólo dos minutos después de esta acción, Diego Costa volvió
a intentar salir en carrera y esta vez el pase a fuera de banda lo dio a
propósito, al sentir un pinchazo en los isquiotibiales. La lesión no es la
misma, pero cuando el cuerpo está débil de un lado, a veces se rompe de otro…
por el sobreesfuerzo.
Así que en su sustitución entró Diego, con el que todos
coincidimos en que debía aprovechar la oportunidad… y la aprovechó.
El Barça no tiró a puerta en el primer acto más que en un
blando cabezazo de Messi, al que replicó de nuevo Villa, tras recortar a Bartra
(que salió por el también lesionado Piqué), en un buen disparo que despejó
abajo Pinto.
Y DIEGO LA APROVECHÓ
Sólo iban once minutos de la reanudación cuando Diego Ribas
aprovechó la oportunidad. "¡Golazo! ¡Golazo!", era lo más que acertábamos a decir
mi padre y yo cuando vimos alojarse ese derechazo desde 25 metros por la
mismísima escuadra (0-1). “¿Qué cómo vi el gol de Diego? Con los ojos”, contestó después
Pinto de forma bastante acertada.
JULIO SALINAS Y EL DINAMISMO...
Mientras tanto, Julio Salinas (ya conocemos su pasado, pero excesivo
su barcelonismo en los comentarios) reivindicaba que si el árbitro paraba el
juego con faltas lo hiciera sólo para mostrar tarjeta. "Así el partido
sería más dinámico”, argumentaba. Claro, Julito, y si os pita dos penaltis,
como contra el Madrid, así vemos más goles…
CRECIÓ EL CANSANCIO... E INIESTA
Pero el Barça es el Barça, y mientras en el Atleti crecía el
cansancio y las tarjetas (Juanfran, Arda, Gabi, Koke, Diego…), en los culés
crecía Iniesta. En el 71, dibujó un precioso pase entre líneas a la espalda de
Juanfran que Neymar cruzó a gol (1-1). “Si Miranda se tira como Godín en la
primera parte, saca esa pelota”, lamentaba mi padre. Y tenía razón. Pero no se
puede ser perfectos.
El de Fuentealbilla lo intentó de nuevo tres minutos después
con un derechazo ajustado al palo que salvó Courtois con un paradón. Lo mismo
que hizo a cinco del final con una falta de Messi que buscaba la escuadra. Pero
no hizo más. Que no les engañen, que por mucho que el Barça dominase al final y
que Courtois hiciera dos grandes paradas, fueron dos paradas. Así que no lo
pinten como el salvador de una posible goleada.
EL SALVADOR DEL ATLETI ES...
El único salvador de este Atlético de Madrid es el Atlético
de Madrid. El bloque. Desde Courtois a Diego Costa, pasando por Juanfran,
Miranda, Godín, Filipe, Arda, Gabi, Tiago, Koke y Villa… (sin olvidarnos de Mario, Diego y Raúl García). Porque este once está
destinado a que grandes y pequeños nos lo aprendamos de memoria… y sea
recordado… por algo grande.
1 comentarios :
Grandioso. Especialmente el partido de Diego, al que en mi opinión, le estaban faltando minutos. Y el martes a soñar
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