viernes, 22 de febrero de 2013

“No nos alcanzó para pasar”

El textual que utilizo como título es de Diego Pablo Simeone después de caer eliminados, como era de prever, ante el Rubin Kazan tras el complicado 0-2 de la ida.
“No nos alcanzó” porque la victoria fue insuficiente (0-1 con gol tardío de Falcao en el 83), pero, sobre todo, no nos alcanzó porque Simeone dejó en tierra, nunca mejor dicho, a ocho de los titulares que ganaron el último partido de Liga: Juanfran, Godín, Filipe, Koke, Gabi, Tiago, Arda y Diego Costa (sólo este último por obligación, sancionado).

CISMA EN TORNO AL CHOLO
La convocatoria del argentino, que a mí particularmente me decepcionó, ha servido para provocar un cisma entre la afición atlética en torno a su figura, hasta ahora incontestable.
En mi caso, sigo teniéndole en alta estima como entrenador. Considero que el año pasado convirtió en campeón a un Atlético que Manzano llevaba abocado a la deriva y le dejó a un punto de Champions. Y que este año ha conseguido algo tan inimaginable y meritorio como llevar 24 jornadas por delante del Real Madrid y haber seguido la estela del Barça durante casi toda la primera vuelta.
Creo que más allá de su concepto futbolístico, que en ocasiones es rácano (especialmente a domicilio), su éxito radica en que ha sabido inculcar el carácter ganador y de lucha que exhibía cuando aún lucía las botas de tacos.
Por ello, mi desilusión al ver el equipo que se llevó a Moscú fue mayor, ya que es antitético con su concepto de sentir este deporte.

EL VALOR, SE LE SUPONE
En la rueda de prensa posterior, Simeone añadió frases como: “Una vez más, el equipo demostró estar lleno de hombres, con gran dignidad, con gran compromiso con el club”...
Aunque bien es cierto que, por desgracia, en la época reciente del equipo esto no siempre ha sido así, hablar de dignidad, compromiso u hombría, en profesionales de la talla de un club como el Atlético de Madrid, debería ser decir perogrulladas.
Como habitualmente repetía mi abuelo, al soldado, el valor “se le supone”. Forma en la que se evaluaba esta cualidad en la cartilla militar cuando el soldado, durante el servicio militar, no había tenido ocasión de combatir por encontrarnos en tiempos de paz.
Creo que las características ensalzadas por el Cholo son equiparables al valor en el soldado.

LO MEJOR, SAÚL
Sí estoy muy de acuerdo en su opinión de destacar como “alegrías” el buen papel que desempeñaron dos canteranos como Manquillo y Saúl.
Especialmente el segundo, que apenas ha contado con oportunidades en el primer equipo, demostró un desparpajo, unas dotes de liderazgo y una clase en su pierna zurda, que me hacen preguntarme qué ha hecho robándole minutos en este equipo durante seis meses Emre...
También me cuestiono si después de dársele tanto bombo a Óliver Torres ¿no será mejor el buen de Saúl? El tiempo lo dirá...

FALCAO TENÍA GANAS
Así que con estos dos chavales, y cracks contrastados como el Cata Díaz o Domingo Cisma, el Atlético de Madrid salió al desierto estadio de Luzhniki a menos diez grados a “intentar” remontar la eliminatoria.
Entre los once elegidos sorprendentemente sí estaba Radamel Falcao, y su sola figura podía dar cierto halo de esperanza.
Se habían hartado a decir que llegaba con muchas ganas a este encuentro (que por cierto reconoció acabar al final “decepcionado”. Otro más) y lo demostró cuando a los cuatro minutos se sacó un disparo arriba, tras un recorte en la frontal, que Ryzhikov desvió a corner.
Pese al equipo suplente, el Atlético dominaba con una autoridad aplastante al Rubin, que parecía seguir el guión de la segunda parte del Calderón, pese a que entonces estaba con diez.
Sin embargo, las ocasiones tardaron en llegar. Un disparo lejano del Cebolla Rodríguez puso en apuros a Ryzhikov al cuarto de hora. Y un tiro en semifallo de Raúl García, dejó solo a Adrián en el flanco izquierdo, pero buscó un pase de la muerte para Falcao que el colombiano intentó rematar de espuela ante la oposición de un defensa.

POCAS OCASIONES... Y DESCANSO
El tiempo corría. El Cebolla y Adrián sumaban internadas por la izquierda, pero sin remate. Y el Rubin se animaba en un par de tímidas contras con disparos de Eremenko y Kyslyak que no pusieron en demasiados apuros a Asenjo.
La ocasión más clara llegó en un centro pasado de Raúl García que se comió el portero ruso, y la pelota rebotó en Kyslyak en dirección a portería. Sin embargo, Kuzmin la sacó en la línea ante la siempre amenazadora presencia de Falcao. Habría sido mucha fortuna. Así llegó el descanso. Y con él, gran parte de las esperanzas de remontada se marcharon.

SIN ESPERANZA... HASTA EL FINAL
La segunda parte ni tan siquiera comenzó con el dominio abrumador de la primera. Sólo Raúl García (en manga corta y sin guantes, por cierto) se inflaba a pegar zurriagazos lejanos, para calentarse, supongo. La mayoría bien pegados, pero ninguno a puerta.
Miranda daba el susto cagándola en un recorte ante Rondón (alguna vez tenía que pasar), pero Asenjo salvaba el mano a mano en una intervención de mérito.
Y en la réplica el chaval, Saúl, se colaba hasta la cocina metiéndose entre tres, pero César Navas evitaba el tanto en un cruce providencial.
Por cierto, no sabía que el Rubin tenía tanto español en sus filas: Navas, Marcano, Orbaiz, Natcho...
Pero el tiempo fue pasando, y el enfado entre los tuiteros atléticos que habían defendido al Cholo en la previa, crecía.
Y en el minuto 83, cuando ya casi ni miraba al televisor, Adrián iniciaba una arrancada poderosa por la izquierda, de ésas que debería protagonizar mucho más por el potencial que tiene, dejaba atrás a dos contrarios y, esta vez sí, encontraba a Falcao, y éste, a la red (0-1).
Sólo quedaban siete minutos. Aún hubo tiempo para el milagro, en un rechace que quedó a pies de Miranda, pero la salida valiente de Ryzhikov taponó su remate. Y César Navas fue expulsado por una dura entrada a Falcao.

LO FIAREMOS A LA COPA
El Atleti ya está fuera de la UEFA Europa League. Esa competición que, como recordé en mi anterior post, tantas y tantas noches mágicas nos ha dado. Espero y deseo que “valga” para que el equipo entre en la Final de la Copa del Rey y se meta en la Champions de forma holgada. En cualquier caso, una clasificación para la Liga de Campeones no es comparable a la emoción y el orgullo de levantar un título en mayo. Lo fiaremos a Su Majestad.

PD: Aprendí que gol de Falcao en ruso se dice “Фалькао цели".

1 comentarios :

Pablo dijo...

A mi tambien me jodio q el Cholo tirase la Uefa. Pero hay q ser realista. No hay plantilla para las 3 competiciones. Esperemos q el miercoles celebremos llegar a otra final. Un abrazo!